Al adentrarnos en las técnicas de animación y creación de cortometrajes, resulta sumamente interesante trabajar con películas surrealistas que presenten imágenes y reminiscencias desde una lógica completamente onírica, libre de toda represión de los sentidos.

Las películas surrealistas captan la atención al instante y, a partir de ellas, la imaginación se dispara hacia lugares insospechados. Es común que los niños reaccionen al ver estas producciones realizadas por adultos reconocidos, diciendo cosas como: «Cualquiera puede hacer esto», «Entonces yo agarro una cámara y filmo un extinguidor de incendios hablando, y listo», o «Ese tipo debe estar loco».

El guionista brasileño Doc Comparato explica que, al comenzar a practicar, es fundamental experimentar con temas realistas para desarrollar una estructura con sentido. En el ámbito de las artes visuales también se argumenta en este sentido. De hecho, se suele mencionar el caso de Picasso como ejemplo. Antes de ser reconocido como el creador del cubismo, se valoraba la calidad de sus dibujos más realistas durante el «período azul».

Cuando los chicos se dedican al cine, ¿debemos hacer hincapié en contar historias reales? ¿Es necesario insistir en las estructuras clásicas de guion? ¿No es preferible que trabajen en la creación de nuevas imágenes, símbolos y significados?

Aquí les compartimos un video muy bueno de un checo llamado Svankmajer, quien ha investigado el diálogo entre múltiples formas de expresión.

Las películas de Svankmajer son reconocidas por sus cualidades surrealistas y provocadoras. Al sumergir a los niños y adolescentes en su mundo imaginativo, podemos animarlos a ir más allá de los límites de su creatividad. Trabajar con las películas de Svankmajer como fuente de inspiración les permite explorar narrativas no convencionales, experimentar con el simbolismo y sumergirse en lo más profundo de su imaginación.

Sumergirse en el surrealismo no solo alimenta la expresión artística, sino que también promueve el pensamiento crítico y la exploración de perspectivas alternativas. Mediante talleres y actividades centradas en el surrealismo y la animación, los niños y adolescentes pueden desarrollar su capacidad para pensar de manera innovadora, desafiar las ideas preconcebidas y desarrollar una voz artística única.

Al abrazar lo surreal y alentar a las mentes jóvenes a explorar las posibilidades ilimitadas de su imaginación, podemos empoderar a los niños y adolescentes para que creen sus propias obras maestras cinematográficas que desafíen las convenciones y dejen una impresión duradera en audiencias de todas las edades.

Empecemos este extraordinario viaje, donde el surrealismo se entrelaza con el potencial inexplorado de los jóvenes cineastas, dando lugar a una nueva era de expresión artística y narrativa.